- Lo primero que hay que saber es que las fosas sépticas deben ser revisadas y vaciadas con cierta periodicidad (dependiendo de sus características, localización y diseño). Este proceso debe ser realizado por compañías especializadas (poceros), dotadas de las oportunas certificaciones y autorizaciones.Esto significa extraer lodos acumulados y eliminar la capa de grasa que se haya podido originar. Una tarea que además debe ser lenta y constante.
En este caso, una comunidad de vecinos, nunca hay que extraer el 100% del lodo ya que es necesario para su funcionamiento. Lo recomendable es extraer hasta el 80% de los lodos cuando hayan alcanzado la mitad del total de la fosa séptica.
Por otro lado, la apertura de los pozos sépticos debe ser lenta y cuidadosa. Siempre evitando respirar los gases. No debemos olvidar que el metano es un gas explosivo (no fumar) y que podemos alterar la presión de la fosa si no la abrimos meticulosamente.
Para limpiar una fosa séptica es necesario ir aportando agua a medida que se extrae la capa superficial (nunca se debe aspirar el fondo) y dejamos funcionar la bomba de aspiración. Esta tarea debe hacerla siempre un profesional para evitar accidentes y asegurarnos la correcta limpieza del pozo séptico.
Limpiar los filtros con agua a presión u añadir activador bacteriano son otras de las labores que los profesionales suelen llevar a cabo durante la limpieza del pozo séptico.
Finalmente, siempre hay que cerrar la fosa asegurándonos en todo momento de la estanqueidad de la misma.
Pero lo más importante es contar con profesionales, equipos de trabajo cualificados como los que Hervill pone al servicio de esta tarea por toda Cantabria.
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